Cristina caracterizó al trabajo del movilero como “un trabajo duro pero muy gratificante para aquellos que aman esta profesión que es el periodismo. Lo del móvil es lo más lindo, estar en la calle en el momento justo donde ocurren las cosas es lo mejor”, dijo.

Welschen también indicó que se trata de un trabajo difícil muchas veces ya que pese a las condiciones climáticas, el periodista movilero debe salir a la calle igual. Además, explicó que “es un trabajo que a veces cuesta porque lo hacemos caminando. Son muy pocos los que cuenta con la movilidad, generalmente los canales. Pero la mayoría anda caminando. Tenemos que coordinar los horarios para llegar a todos lados”.

La tarea también se dificulta cuando las noticias no están tan expuestas. En este sentido, Cristina contó que “hay veces que hay muchas noticias y otras que no. Ahí nos las ingeniamos para encontrar la noticia. Si no hay nada resonante, político recurrimos a los policiales por ejemplo, a los comercios, hablamos del clima”.

Otra de las dificultades con las que se encuentran los movileros es la negativa de los ciudadanos y muchas veces las mismas autoridades a hablar frente a grabadores, teléfonos móviles y cámaras de televisión. “Nos ha pasado muchas veces que la gente se niega a hablar. Los empleados de instituciones por orden "de" que no nos hable. Por ahí cuando te identifican que sos de determinado medio no quieren hablar y a veces te tratan mal y te cierran las puertas. Los que estamos en la calle no tenemos nada que ver con los dueños de los grandes medios”, acentuó.

Además existen hechos que marcan la profesión de quienes se dedican a hacer móviles en los distintos medios de comunicación. Cristina contó una experiencia particular: “me tocó cubrir la tragedia del Paraná y de eso no me voy a olvidar nunca. En esos casos es muy difícil separar el sentimiento de la objetividad periodística. Fue una experiencia que nos dio mucho”.

Cristina Welschen recalcó la solidaridad entre quienes a diario salen a las calles para contar las principales noticias. Destacó que se trata de un grupo muy unido de aproximadamente 15 movileros. “Hay gente que hace años lo hace y gente nueva que se está incorporando. Nos entretenemos mucho cuando hacemos las notas y siempre encontramos algo para divertirnos aunque a veces tengamos que cubrir notas difíciles como tragedias, protestas, etc.”

Además subrayó que si bien se trata de trabajadores de distintos medios de comunicación es un grupo solidario entre sí. “La mayoría pensamos que somos trabajadores y no representamos a nadie, no nos ponemos la camiseta de nadie porque hoy estoy en un medio y mañana puedo estar en otro. Lo bueno es que tengamos una buena relación como profesionales y personas, basada siempre en el respeto”, expuso.